Se ha probado que el ozono es eficaz en la desinfección de hongos, bacterias y virus. En el caso de estos últimos, el gas ataca a la cadena genética del virus (ADN o ARN) provocando la desnaturalización de sus proteínas e impidiendo que el virus pueda reproducirse.

Su principal ventaja es que no deja residuos tras la desinfección pues se convierte en oxígeno y también elimina los malos olores. Además, se trata de un proceso sencillo, rápido y relativamente barato. Al ser un gas, el ozono actúa sobre cada rincón del habitáculo, incluyendo superficies y tejidos, lo que garantiza su efectividad con periodos de desinfección de 15 o 20 minutos.

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¿Por qué se usa el ozono contra el coronavirus?

Para desinfectar y eliminar olores de manera rápida y potente en ambientes, superficies y tejidos. Un tratamiento de choque con ozono que desinfecta y elimina olores en habitaciones de hotel, geriátricos, hospitales, en interiores de coches, caravanas, auto caravanas, trenes, aviones. También usado en almacenes, industrias alimentarias, veterinarias, gimnasios, guarderías, etc… Una máquina imprescindible para profesionales de la limpieza. Recientemente sabemos que el ozono elimina eficazmente insectos como polillas, pulgones, gorgojo y chinches, y que además repele a arañas, cucarachas y otros macro insectos.